En este libro del siglo XIX, la llegada de Fray Perico y su borrico Calcetín perturba la vida tranquila de veinte frailes en un convento de Salamanca. Los frailes, que se dedican a hacer el bien y compartir lo que tienen, se ven envueltos en situaciones humorísticas y alegres debido a la presencia de este simpático personaje. La historia nos sumerge en aventuras divertidas protagonizadas por un fraile y su borrico.