El libro cuenta la historia de una madre que puede pasar por diferentes estados de ánimo, reflejados a través de truenos, nubes y un arcoíris en su cabeza. Esto afecta la relación con su hijo, quien se cuestiona si él también experimenta estas emociones. La narrativa parece abordar la importancia de la salud mental y la expresión emocional en el entorno familiar, presentando situaciones cotidianas de manera imaginativa y reflexiva.